Si en nuestra primera entrega analizábamos la PÉRDIDA de VALOR que implica para Telefónica la segregación de una serie de actividades en las nuevas TECH e INFRA, hoy nos vamos a centrar en cómo se van a nutrir de personal estas nuevas jurídicas.
Según la información facilitada, buena parte vendrá de filiales como la antigua Telefónica Digital, TIWS, I+D y TIS. En algunos casos, los trabajadores y trabajadoras pasarán directamente desde su actual sociedad, a través de su integración en las nuevas unidades, como es el caso del paso de ciberseguridad, que pasa en su totalidad.
Una segunda vía es el traspaso de plantilla desde las divisiones españolas, acogidas al Convenio de Empresas Vinculadas (CEV), es decir, Telefónica de España (TdE), Telefónica Móviles (TME) y Telefónica Soluciones (TSOL), donde ya hay condiciones pactadas.
La tercera -y última vía de incorporación de personal- será la contratación de manera externa, en este último caso, con condiciones acordadas individualmente.
Vista la amalgama de orígenes y las distintas condiciones laborales que van a tener de partida cada uno de estos colectivos (ej. el personal proveniente del II CEV conservará sus condiciones hasta la finalización de este, en 2022), nada hace pensar que, acabados los distintos “periodos de gracia” pactados, un hipotético primer convenio para estas nuevas jurídicas vaya a mantener, y mucho menos mejorar, las condiciones de aquel.