Perspectiva de las empresas ante los retos de futuro que enfrenta el empleo en el sector comercio
Las distintas fuentes que analizan el consumo de las personas evidencian que para este año 2024, pese al alza de los tipos de interés, la inflación y la amenaza de recesión, el consumo se mantiene relativamente estable, debido a que un crecimiento lento pero constante del empleo y de los salarios.
Se prevé, sin embargo, un cierto cambio en la prioridad con la que los consumidores realizaremos el gasto, de tal forma que, sin dejar de consumir, pondremos el foco en ofertas y descuentos restringiendo el gasto en experiencias y cosas que no son de primera necesidad, buscamos de alguna forma, equilibrar el presupuesto familiar de forma más minuciosa.
De los resultados de una encuesta realizada por la empresa CapGemini en enero de 2024, se indica que el 61% de los consumidores están preocupados por su situación financiera y el 69% está recortando gastos no esenciales.
La tecnología también desempeñará un papel más importante en cuanto a la innovación y la eficiencia de los comercios y los consumidores, desde la forma en que las marcas responden a las mayores expectativas de los consumidores hasta cómo mantienen la competitividad en un sector en crecimiento.
Las tendencias del sector del comercio reflejan un cambio importante orientado hacia un panorama centrado en el cliente e impulsado por lo digital.
La economía parece que empieza a estar más “normal”, pero aún sigue siendo una economía que continúa reequilibrándose, lo que significa que los consumidores y las empresas priorizarán en qué gastar y en qué invertir.
Algunos de los factores económicos que podrían afectar al sector del comercio a nivel mundial en 2024:
Qué esperar en Europa
Los europeos parece que tendrán un mayor poder adquisitivo en 2024, impulsado por un crecimiento de los salarios que supere a la inflación. Pero puede haber diferencias significativas en la forma en que gastan ciertos compradores, por lo que el sector se centrará en adaptar sus estrategias para satisfacer las diversas necesidades de los segmentos de consumidores.
El sector del comercio ha experimentado una transformación sin precedentes en las últimas décadas, impulsada por avances tecnológicos, cambios en los hábitos de consumo y la globalización. Estos cambios han planteado una serie de desafíos significativos para las empresas, especialmente en lo que respecta al empleo.
Comentaremos ahora la perspectiva de las empresas ante los retos futuros que enfrenta el empleo en el sector del comercio, analizando las tendencias actuales, los impactos previstos y las estrategias que las empresas están adoptando para adaptarse a este nuevo panorama.
Tendencias Actuales en el Empleo en el Sector del Comercio
Una de las tendencias más relevante es la automatización, impulsada por avances en inteligencia artificial, robótica y tecnologías de automatización de procesos. Esto ha llevado a una creciente preocupación sobre la pérdida de empleos tradicionales en el comercio, especialmente en las posiciones de caja y logística, que están siendo reemplazados por sistemas automatizados.
Además, el auge del comercio electrónico ha transformado la forma en que las empresas operan y requieren una fuerza laboral adaptada a las demandas del entorno digital. Se necesitan habilidades en marketing digital, gestión de plataformas de comercio electrónico y análisis de datos para competir en este espacio altamente competitivo.
Otra tendencia importante es la creciente demanda de empleados con habilidades blandas, como la creatividad, el pensamiento crítico y la capacidad de adaptación. A medida que las empresas buscan diferenciarse en un mercado saturado, estas habilidades se vuelven cada vez más valiosas para generar nuevas ideas, resolver problemas y proporcionar un excelente servicio al cliente.
Impactos Previstos en el Empleo
Los cambios en el empleo en el sector impactan necesariamente tanto en las empresas como en los trabajadores. Se espera que la automatización y la digitalización conduzcan a una reducción en la demanda de trabajadores en posiciones tradicionales, lo que podría resultar en despidos masivos.
Pero, también surgirán nuevas oportunidades de empleo en áreas relacionadas con la tecnología, como el desarrollo de software, la gestión de datos y la experiencia del usuario. Las empresas que puedan adaptarse rápidamente a estos cambios tendrán una ventaja competitiva en la atracción y retención de talento.
Además, la transición hacia un modelo de comercio más digitalizado podría tener consecuencias significativas para los trabajadores menos capacitados o conhabilidades obsoletas. Estos individuos podrían enfrentar dificultades para encontrar empleo en un mercado laboral cada vez más orientado hacia la tecnología, lo que subraya la importancia de programas de capacitación y reciclaje laboral para garantizar una transición justa y equitativa hacia la nueva economía digital.
Estrategias Empresariales para enfrentar los retos del Empleo en el futuro
Ante estos desafíos, las empresas en el sector del comercio están adoptando una serie de estrategias para asegurar su relevancia y sostenibilidad en el futuro. Una de estas estrategias es la inversión en tecnología y capacitación digital. Las empresas están implementando sistemas automatizados para mejorar la eficiencia operativa y están capacitando a su fuerza laboral en habilidades digitales para garantizar que estén equipados para trabajar en un entorno cada vez más digitalizado.
Además, muchas empresas están priorizando la diversidad e inclusión en su fuerza laboral como una forma de fomentar la innovación y la creatividad. Al reclutar talento diverso de diferentes orígenes y perspectivas, las empresas pueden generar ideas más innovadoras y tomar decisiones más informadas que reflejen las necesidades de una base de clientes cada vez más diversa.
Otra estrategia importante es la adopción de modelos de trabajo flexibles, que permiten a los empleados trabajar desde cualquier lugar y en cualquier momento. Esto no solo mejora la satisfacción laboral y la retención de empleados, sino que también amplía el acceso a oportunidades laborales para personas con discapacidades o responsabilidades de cuidado.
Trabajar en elaborar unos buenos “Planes previsionales de Empleo” que permita a las organizaciones anticipar los cambios que se van a ir produciendo en el negocio que impactan en las funciones y en los conocimientos y competencias que los empleados deben tener para realizar su trabajo, permite a las empresas anticipar formaciones y facilitar la adaptación de las personas a los nuevos retos derivados de la evolución de los puestos de trabajo para dar respuesta a las necesidades del negocio.
Igual de importante es el reto de conocer el talento interno, para lo cual se hace imprescindible desarrollar y preparar a las personas para mantener conversaciones de carrera con sus mánagers y proponer itinerarios de formación y de desarrollo de carrera profesional acorde con las competencias, intereses y motivaciones de los empleados, alineados con las necesidades de las organizaciones.
Y adquieren por ello gran importante los Planes de Formación, tanto para los empleados como para los managers. Estos últimos son pieza clave para asegurar que la gestión del cambio se realice.
El papel de los mánagers en este entorno cambiante
El papel de los managers en la gestión del cambio y en la formación de sus empleados es fundamental para el éxito y la adaptabilidad de una organización en un entorno empresarial en constante evolución. Los managers actúan como líderes y facilitadores que guían a sus equipos a través de procesos de cambio y los capacitan para adquirir las habilidades necesarias para enfrentar los desafíos del futuro.
LHH, realizó un estudio global para entender cuáles son las nuevas tendencias y perspectivas de los líderes y entender los retos a los que se enfrentan. El resultado fue casi el 90% de las respuestas recibidas mencionaba la agilidad para adaptarse a los continuos cambios y la adaptación a las constantes y continuas reorganizaciones, como los principales retos que afrontan los líderes y para los cuales deben estar preparados; como tercer reto y no menos importante, figura el reclutamiento y la retención del talento, así como la motivación de los equipos y conocer el talento interno.
Estos cinco retos son algunos de los muchos que afrontan actualmente los líderes en cualquier organización y no son menores. Sin embargo, también desde LHH hemos observado cómo los líderes a veces son los grandes olvidados en cuanto a su desarrollo y formación. Hoy, más que nunca, formar y capacitar a los líderes es una tarea imprescindible. Ellos son pieza clave para garantizar la gestión del cambio en las organizaciones y requieren también de formación y capacitación para estar preparados y gestionar adecuadamente a los equipos para conseguir los resultados fijados por la dirección.
Desde LHH, también hemos identificado otros retos que exigen a los mánagers desarrollar habilidades como las que enumeramos:
Versatilidad: entendida como la capacidad de leer, responder y superar las crisis y el ritmo intenso del cambio.
La agilidad mental, ingrediente clave para abandonar los viejos marcos conceptuales ante los desafíos.
Los managers desempeñan un papel crucial en la gestión del cambio dentro de una organización. Esto implica liderar el proceso de cambio, comunicar eficazmente la visión y los objetivos del cambio, y ayudar a los empleados a adaptarse a nuevas formas de trabajar.
Algunas de las responsabilidades clave de los managers en la gestión del cambio incluyen:
Comunicación efectiva: Los managers deben comunicar claramente la razón detrás del cambio, los beneficios esperados y cómo afectará a los empleados. Esto implica ser transparente, responder preguntas y abordar las preocupaciones de los empleados para generar confianza y compromiso.
Apoyo y motivación: los managers deben proporcionar apoyo emocional y motivacional a sus equipos durante períodos de cambio. Esto puede implicar reconocer y validar las emociones de los empleados, ofrecer recursos y capacitación adicionales, y celebrar los logros a medida que se alcanzan hitos importantes en el proceso de cambio.
Modelado de comportamientos: los managers deben actuar como modelos a seguir al demostrar su compromiso con el cambio y adoptar los nuevos procesos y comportamientos requeridos. Esto ayuda a inspirar confianza en los empleados y les muestra que el cambio es posible y beneficioso.
Además de gestionar el cambio, los managers también tienen la responsabilidad de formar y desarrollar a sus empleados para que puedan desempeñarse de manera efectiva en sus roles actuales y futuros. Esto implica identificar las necesidades de capacitación de los empleados, proporcionar oportunidades de desarrollo y ofrecer retroalimentación constructiva para mejorar el rendimiento. ¿Cómo lo pueden hacer?
Podemos concluir indicando que los managers desempeñan un papel crítico tanto en la gestión del cambio como en la formación de sus empleados. Actúan como líderes y facilitadores que guían a sus equipos a través de períodos de cambio, comunican la visión y los objetivos del cambio, y ayudan a los empleados a adquirir las habilidades necesarias para adaptarse y prosperar en un entorno empresarial en constante evolución. Su capacidad para gestionar eficazmente el cambio y desarrollar a sus empleados es fundamental para el éxito a largo plazo de la organización.
Belén Ferrer
Head of Restructuring & Public Sector
LEE HECHT HARRISON, S.L. (LHH)